Cualquiera diría que me paso el día de fiesta, comiendo por media España. Nada más lejos de la realidad.
En este caso, perdí todo mi actual glamour (je,je) y paré a comer en un bar de camioneros. Cierto es que los garitos de carretera se catalogan por el número de camiones aparcados a su lado. A mayor número de camiones, más tenedores. Pues bien, paramos a comer en el Restaurante Delfín, el típico de familia, de toda la vida. Menú abundante a 10€ (un poco carillo para la zona). La comida nada fuera de lo normal, más bien los platos de toda la vida.
Pero merece especial atención uno de sus postres: flan de chocolate blanco. Como un flan de los de toda la vida, pero con un sabor exquisito (huummmm) y un poco más consistente que los demás. Todavía me relamo del gusto.
Categoría: restaurante familiar de carretera
Camareros: 7*, muy agradables y eficientes
Baños: 6* limpios, aunque un poco estrechos.
Decoración: 2* horrible, necesita una reforma pero ya, además de quitar esos horribles cuadros de la pared, que a mi madre le encantaron, prueba de que eran horrorosos.
Precio: 5* se suben un poco a la parra.
Situación: 4*, cerca de la salida de la autovía.
Comodidad: 5*
Variedad del menú: 7*
Valoración de la comida: 5*
VALORACIÓN GENERAL: 5*
Fecha de la visita: agosto 2006
Flan de chocolate blanco... ¿Por dónde dices que cae Astorga?
ResponderEliminarJaja, por León :P
ResponderEliminarespera, ¿o era en Murcia?
ResponderEliminarPues no lo conozco, no, pero lo del flan de chocolate blanco tiene una pinta, que va a haber que parar en Astorga por algo más que los mantecados que le dieron fama...
ResponderEliminarPor cierto, el restaurante también tiene tienda donde venden mantecadas ;)
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