Últimamente se viene hablando mucho de la nueva "seguridad" que, parece, se va a imponer en los aeropuertos de gran parte del mundo. Todo comenzó con un frustrado intento de atentado en un vuelo de Ámsterdam a Detroit, el 253 de Northwest Airlines (perteneciente a Delta). Un pasajero habría intentado hacer explotar el avión, fallando en el intento. Todas las miradas se giraron al control que se lleva a cabo en los aeropuertos. Supuestamente es un control exhaustivo, pero ¿cuántas veces pasamos productos prohibidos sin darnos cuenta y sin que la policía tampoco se percate? Los cacheos parecen no ser arma suficiente, ni tampoco los rayos X. Ahora se quiere dar un paso más allá y hacer un escáner corporal a todos los pasajeros.
El primer país en anunciarlo ha sido Holanda, que ha visto su oportunidad de oro en el incidente. Inglaterra ha mostrado su interés esta semana y seguro que lo harán. También EEUU. Y seguro que dentro de poco la Unión Europea también tendrá algo que decir.
Muchas voces alertan de que los citados escáneres provocan cáncer a largo plazo (personas que viajan mucho por negocios se verían gravemente afectadas) y suponen una violación de la libertad personal.
Pero, ¿nos librarán los escáneres de las mentes perversas?
Por su parte, algunos pasajeros del famoso vuelo 253 sostienen que la historia no es como la cuentan, que el protagonista del incidente embarcó sin pasaporte y acompañado por dos hombres más, uno de ellos equipado con cámara de vídeo.
Eso último del "terrorista" sin pasaporte está confirmado?
ResponderEliminarPorque algo he leido por ahí, pero me parece demasiado nnncreible...
No, eso dicen por ahí, pero no está confirmado. Pero es pausible que hubiese un fallo en cadena, a ver si algún día lo sabemos...
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