Viendo tantas fotos del hotel pensarás que he vivido o trabajado allí. Pero nada más lejos de la realidad. Lo cierto es que me alojé gratis (sí, gratis) y me dieron un tour por todos los tipos de habitaciones.
El hotel está genial. Un 4* que podría pasar por 5, es muy moderno y el edificio es completamente nuevo, se construyó hace unos cinco años.
Nada más pasar por recepción te das cuenta de que no es uno de estos hoteles rancios que se han quedado anclados en el pasado. Cuenta con una barra larga en la que se posicionan los recepcionistas y a su espalda tienen una pared completamente de cristal que contiene un pequeño jardín japonés.
Y se me ha olvidado mencionar el hilo musical de la entrada del hotel, que inunda la calle. Difícil no darse cuenta un día por la mañana donde lo único que quieres es un café :).
habitación estándar |
Nada más pasar por recepción te das cuenta de que no es uno de estos hoteles rancios que se han quedado anclados en el pasado. Cuenta con una barra larga en la que se posicionan los recepcionistas y a su espalda tienen una pared completamente de cristal que contiene un pequeño jardín japonés.
Y se me ha olvidado mencionar el hilo musical de la entrada del hotel, que inunda la calle. Difícil no darse cuenta un día por la mañana donde lo único que quieres es un café :).
Seis ascensores te llevan a los 36 pisos del edificio. Miento, realmente sólo 4 te llevan a las últimas plantas, los otros dos llevan a la parte más baja. Porque lo curioso de este hotel es que está construido en dos distritos diferentes de la ciudad. Por ello en una parte la altura máxima eran 7 pisos y en la otra se pudo erigir un rascacielos de impresión.
Los 4 ascensores del fondo son los que llevan a la parte más alta y lo hacen a un ritmo vertiginoso. A mí me daba un pequeño vuelco el estómago cada vez que me dirigía a nuestra habitación en el piso 18.
Las habitaciones son muy espaciosas. No hay que olvidar que Nueva York es una ciudad cara, el metro cuadrado está por las nubes y las habitaciones de los hoteles solían concebirse como cajas de cerillas. Tranquilos, que este hotel no es así. A pesar de que nuestra habitación tenía dos camas dobles, había espacio suficiente y son las habitaciones más pequeñas del hotel.
¿El baño? Un sueño. Es el que me encantaría tener en mi casa. La ducha es gigante. Tienes un montón de espacio y la ducha es de lluvia. Pero no sólo eso, también tienes una pequeña manguera de ducha de toda la vida que puedes utilizar a la vez que la superior, o independientemente. Y si eres de los de bañera, te diré que las bañeras en los hoteles están totalmente fuera de moda. Y si la encuentras, ten por seguro que también habrá una ducha independiente.
Los 4 ascensores del fondo son los que llevan a la parte más alta y lo hacen a un ritmo vertiginoso. A mí me daba un pequeño vuelco el estómago cada vez que me dirigía a nuestra habitación en el piso 18.
Las habitaciones son muy espaciosas. No hay que olvidar que Nueva York es una ciudad cara, el metro cuadrado está por las nubes y las habitaciones de los hoteles solían concebirse como cajas de cerillas. Tranquilos, que este hotel no es así. A pesar de que nuestra habitación tenía dos camas dobles, había espacio suficiente y son las habitaciones más pequeñas del hotel.
¿El baño? Un sueño. Es el que me encantaría tener en mi casa. La ducha es gigante. Tienes un montón de espacio y la ducha es de lluvia. Pero no sólo eso, también tienes una pequeña manguera de ducha de toda la vida que puedes utilizar a la vez que la superior, o independientemente. Y si eres de los de bañera, te diré que las bañeras en los hoteles están totalmente fuera de moda. Y si la encuentras, ten por seguro que también habrá una ducha independiente.
¿Que viajas por negocios o te gusta pegarte un capricho? Pues no te conformes con las habitaciones estándar. Tienes las habitaciones deluxe, que son un poco más grandes y tienen un cómodo sofá.
Pero si aún quieres más y ojo, porque a medida que sube el nivel, vamos subiendo de pisos y de vistas espectaculares, puedes pedir una de las 4 suites. Y fíjate en las fotos, porque tu concepto de suite acaba de ser rediseñado.
Tienes un pedazo de salón comedor precioso con mucha iluminación y una tele gigante.
Un dormitorio enorme con un igualmente enorme baño.
habitación principal de la suite |
Y además hay una pequeña habitación para invitados y/o niños. Separado hay un pequeño aseo que da servicio a la habitación y a la vez al salón-comedor.
Pero vayamos a lo más espectacular del hotel. Porque por si hasta ahora no te hubieses enamorado con todo, absolutamente todo lo visto anteriormente, el hotel cuenta con una suite penthouse.
parte del salón |
vistas desde el salón |
Esta suite es más grande que el piso cualquiera de nosotros podrá posiblemente permitirse y es un ¡oh! ¡uau! constante.
¿no te enamora?
Consta de dos pisos y en el bajo hay un pequeño baño, una cocina (sin fuegos, pero con todo lo demás) y un precioso salón-comedor con un techo muy alto y que en parte está ocupado por la segunda planta y con la esquina completamente de ventanales. Por supuesto, las vistas son impresionantes.
En la planta superior, además de un baño increíble con una preciosa bañera con vistas al salón, tienes un saloncito pequeño y una preciosa habitación doble.
La habitación tiene una tele de pantalla plana increíblemente grande.
El baño es increíble. Con bañera y dos duchas, tiene todo, absolutamente todo a todo lujo. ¿No te encantaría darte un relajante baño mientras supervisas el ajetreado tráfico neoyorkino?
Pero volviendo al mundo real... todas las habitaciones cuentan con iPod dock, un ordenador de sobremesa (dicen que por si se te ha olvidado el tuyo, pero yo creo que es por comodidad y porque siempre acabarás picando y pagando por internet), una máquina de café tipo Nespresso y por supuesto: minibar, caja fuerte y secador de pelo.
Por si lo necesitases, algunas son habitaciones comunicadas.
Las plantas inferiores del hotel tienen cristal triple y las superiores doble ventanal.
Las plantas inferiores del hotel tienen cristal triple y las superiores doble ventanal.
El gimnasio es otro mundo. Es más pequeño que tu gimnasio local, pero cuenta con casi todo. Tienes hasta pesas y todas esas máquinas que no encontrarías en ningún otro hotel.
Y el restaurante del hotel es también un lugar que debes visitar, ¡todo buenísimo!
Mascotas aceptadas
web
fotos © Raquel Ritz
Y el restaurante del hotel es también un lugar que debes visitar, ¡todo buenísimo!
NEW YORK CITY, NY, 10036
USA
Teléfono: +1-212-803450
Mascotas aceptadas
web
fotos © Raquel Ritz
View Raquel Ritz Viajes in a larger map
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Te he ayudado? Dímelo, ¿no? ;)
Los intentos de publicidad o enlaces a otras webs con fines de promoción no son bienvenidos y son eliminados en menos de 24 horas.